17/06/2013. “La playa es el espacio más democrático que existe en este país. En la arena siempre hay de todo: blancos, negros, indígenas y mestizos (…). Todos tomando el sol, el mismo sol”. Así describe Carla Guimarães en Los últimos días de Carnaval el lugar en el que transcurre esta novela: Salvador de Bahía.  Para la autora, escribir sobre Brasil implica tratar temas como la pobreza o la represión policial hacia la gente de color. Es por ello que esta obra, además de ser una historia de amor entre Carnaval y la narradora, es también un relato de denuncia social. La historia nace a partir de una idea del padre de Carla Guimarães, que quería que su hija experimentara diferentes profesiones. En esta entrevista la autora nos cuenta que la novela surgió a partir de una visita traumática a un depósito de cadáveres. Una novela que –confiesa- es en gran medida autobiográfica. Siendo dramaturga y guionista de la HBO, sorprende que Guimarães apenas haya introducido diálogos en su primer libro. Ella nos explica que fue una manera de ponerse a prueba a sí misma a la hora de escribir en castellano.