La Casa de América ha sido desde su fundación un lugar de encuentro donde han confluido los ya consagrados artistas e intelectuales iberoamericanos con los jóvenes que recién empiezan y con aquellos que hacen una cultura alternativa. Confluye el público afín a la temática latinoamericana con la gente que se acerca por primera vez curiosa de conocer algo nuevo. Como dice Santos Discépolo en Cambalache, se puede encontrar "la biblia junto a un calefón". Como productora de cine, el cine de Casa de América ha significado mucho a la hora de promocionar nuestras películas de estreno, así como para su difusión posterior. Tanto de los títulos taquilleros, como de aquellos menos conocidos para el público y que necesitan un espacio como éste para darse a conocer. Casa de América realizó por primera vez un ciclo de cine uruguayo cuando esta cinematografía recién empezaba a despuntar, y así ha dado a conocer muchas otras. Bajo su techo se reunieron directores, guionistas y productores de distintas nacionalidades dando lugar a muy fructíferos encuentros. Tener un espacio donde se pueda ver, discutir, analizar y disfrutar el cine iberoamericano es un privilegio que no existe en ningún otro país y que permite asomarnos un poco a la ventana de todas nuestras culturas. Casa de América está tan instalada hoy como centro cultural, de ocio y de encuentro, que a veces es difícil apreciar el esfuerzo que hay detrás para que todo fluya como un relojito. Tenemos plena conciencia que en el corazón de Madrid, en la Cibeles, late mucho cine y hay un palacio dentro de una burbuja de efervescencia cultural que entre todos tenemos que preservar.

Mariela Besuievsky (Uruguay/España) Productora - Tornasol Films