24/04/2013. Lola Mayo y Javier Rebollo son seguramente el mejor ejemplo de compenetración entre guionista y director en el cine español. Rebollo ha confiado en ella para sus tres películas: Lo que sé de Lola, La mujer sin piano y El muerto y ser feliz. Y antes de dar el salto al largometraje, también trabajaron juntos en varios cortometrajes. De ese salto del corto al largo nos habla la guionista.  Lola Mayo explica que para la escritura conjunta de un guión es necesario que cada uno tenga muy claro qué es lo que se le da mejor y dónde están sus límites. Asimismo, considera que es importante que exista una buena sintonía entre guionista y director. Sintonía que, sin duda, ella ha alcanzado con Rebollo.   Lola Mayo participó en el coloquio sobre El muerto y ser feliz el pasado 23 de abril junto a Javier Rebollo y José Sacristán. La película volverá a proyectarse del 1 al 4 de mayo en Casa de América.