27/05/2019. Su nuevo libro Largo pétalo de mar, nos recuerda un poco al que fuera el primero, La casa de los espíritus. Tal vez porque es la historia del pasado a través de la familia. Esta vez, Isabel Allende nos adentra en el exilio de una forma más profunda. A través de unos refugiados españoles que llegan a Chile en el barco Winnipeg, y que al estallar la dictadura de Pinochet se vuelven a exiliar en Venezuela, la escritora chilena hace hincapié en el desarraigo y las relaciones humanas.

"Lo que más me interesaba era la historia de los refugiados, esa gente que sale huyendo para salvar la vida", señala. La primera vez que oyó hablar del barco Winnipeg fue en la casa de su abuelo, donde iban asiduamente algunos de esos republicanos exiliados. Años después, conoció en Caracas a Víctor Pey, uno de estos refugiados que le contó la historia en primera persona, y quien le inspiraría después a escribir el libro. 

Además, el tema del exilio le toca muy de cerca, ella mismo marchó a Venezuela durante la dictadura militar en su país: "Siempre he sido una desarraigada, el tema del exilio me toca muy de cerca". Pablo Neruda es otro de los protagonistas del libro, tanto su faceta de política como de poeta, alguien que ha sido importante para la autora: "Su obra me ha acompañado siempre en estos largos periplos de viaje y de exilios y de volver a empezar, siempre llego a Neruda conmigo".